Mañana se acaba el mundo, así que por eso me doy prisa en escribir este post (no vaya a ser que ya no me dé tiempo), pues lo que os traigo es una información de cuantioso valor, una primicia, una exclusiva, el mañana traído al hoy: Un adelanto del Diccionario de Neolengua 2013.
No son pocas las veces que he visto, en estos últimos días, de qué manera en los medios de comunicación, nuestra viejalengua era corregida y perfeccionada por periodistas, tertulianos y políticos. Y estoy contenta por ello, porque ni mi pensamiento ni mi memoria podrán confundirme más, no podrán engañarme ni llenarme de ideas erróneas y peligrosas.
La primera palabra que cambiará (bueno, de hecho ya ha cambiado) es amnistía, que ha sido sustituida por regularización.
Ahora ya no pediremos amnistía para los presos, sino regularización de los mismos.
Y por supuesto, y este será el cambio principal, habrá un nuevo logo en el 2013:
Otro cambio que nos llegará con los nuevos tiempos, será la eliminación de un verbo que hemos pasado años sin mencionar y ahora está en todos lados. Difícil trabajo el que se nos encomienda: tener que borrarlo de nuestro pensamiento y de nuestras bocas. Ya no existe privatizar, ahora se dice externalizar (y es tan nueva la palabra, que en el Diccionario de la Viejolengua de la RAE ni siquiera existe!!... ay, estos atrasados...).
Parece una tontería, sí, pero fijaos qué detalle tan insignificante y de qué manera nos afectará: ese momento tan cotidiano y común cuando vamos a los servicios de un bar, restaurante o cantina, y siempre nos encontramos con dos puertas, en una pone ASEOS y en la de al lado (siempre tan misteriosa) una nueva palabra se exhibirá ahora pegada a su madera: EXTERNALIZADO.
De igual manera, en este nuevo año habrá: Cotos externalizados de caza, Parking Externalizado, Detectives Externalizados y los famosos dirán eso de: "Yo de mi vida externalizada no hablo".
Y esto es sólo un ejemplo de la manera en que repercutirá en nuestras vidas.
Y por último y, en mi opinión, el mayor cambio, que sin duda perfecciona esta nuestro mundo: se acabó la emigración. Ahora las personas que cambian de país en busca de un futuro mejor, se exportan, no emigran (hay quien se atreve a llamarlos aventureros, pero eso es un avance tal que todavía da miedo, como los coches voladores).
Así que ahora la famosa canción El Emigrante, de Juanito Valderrama, pasará a llamarse El Exportado.
Total, que si el sábado seguimos vivos, ya no habrá amnistías, ni privatizaciones ni emigrantes. Sólo habrá color, alegría y la sonrisa de un niño, que es lo más valioso.
Estoy deseando tener en mis manos el Diccionario de Neolengua 2013 al completo, que espero traerá perfección a nuestras vidas, cambiando parados por ciudadanos en barbecho, agentes de la autoridad por agentes de higiene social y protestas por crimental.
Amigos, qué gran regalo.
Para más información estad atentos a vuestras telepantallas.
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