29.6.11

▲ ▲ ▲

Sí, definitivamente he abandonado el terreno de la simpatía para zambullirme en la obsesión absoluta.



28.6.11

hematofilia

Nada importa: ni lo fina que sea la arena que se te haya quedado en los calcetines, que hace que recuerdes días mejores, ni tampoco la sal en el pelo. No importa que tengas tres meses de vacaciones, todas las asignaturas aprobadas y que tu cuenta corriente engorde por momentos. Nada es suficiente: ni los amigos, ni las risas, tumbarse al sol, las fiestas, bailar, las hogueras en la playa, una barbacoa, danza kuduro y las moscas en la casa. No importan los viajes que tengamos pendientes ni los recuerdos de los que ya hemos hecho. Mamá. Tu casa, que siempre espera tu vuelta. Tu cama, tus libros, tu sofá, tu taza favorita, los días vacíos, preparados para llenarse con cualquier cosa, o para seguir estando vacíos. Ni siquiera el fuet es suficiente, ni la tortilla de patata con cebolla poco hecha, con el huevo líquido, como un elixir, ni la sandía fría, ni el pan de chapata. No señor.

Tu verdadera Vida empieza cuando empieza la cuarta temporada de True Blood.

22.6.11

arena

Destruye tu cuerpo para destruir tu mente.
Si vamos a dejarnos morir, en la playa es mucho mejor.



21.6.11

solsticio

Solsticio es una palabra interesante. De ésas que se dicen poco, porque ocurre sólo dos veces al año y apenas nos damos cuenta. Solsticio: la lengua bailando al pronunciar una L y después una S y después una T.

21 de junio, comienza al verano, para todos los que vivimos en el hemisferio norte, esa mitad imaginaria de la tierra que se considera rica y desarrollada, pero desde donde se ven menos estrellas y menos brillantes, porque está orientado hacia fuera de la Vía Láctea.

Hoy es el día más largo y la noche más corta para nosotros. En el Trópico de Cáncer, el Sol estará sobre el horizonte 13,4 horas. En el Círculo Polar Antártico, es el único día en que el Sol no sobrepasará el horizonte en 24 horas. En el Ártico, habrá 24 horas de sol ininterrumpidas. En el Polo Sur, el Sol nunca sale. En el Norte, está siempre. Nosotros tenemos la luz, pero ellos tienen los pingüinos. Me parece justo.

Tendremos que esperar 6 meses hasta el próximo solsticio, el de Invierno, el 21 de diciembre, donde todo ocurrirá exactamente al revés. De momento, celebraremos San Juan, saltaremos hogueras, que apenas notaremos, porque en Madrid parece que vivamos ya dentro de una de ellas, y mientras, se nos irán pegando, a la piel y a la mente, las canciones del verano.

El azul del agua, el azul del cielo, la arena blanca, el pavimento gris, ardiendo, los chicles pegados fusionándose en la suela de nuestras sandalias. La misma casa, la misma ciudad, el mismo sol pero más alto, el mismo día para hacer las mismas cosas, sólo que más largo.

Solsticio, solsticio, hasta google lo ha celebrado.

Hola maldito verano, parecía que no ibas a llegar nunca.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...